Versos humanos
DESEOS DE UN AMANTE

  Está la perla emboyada
Como el diamante en el mar:
Se quere tiempo i paciencia
Para poderla gozar.

  ¡Ai, quién pudiera, belleza,
Colocarte entre mi pecho
I buscarte con provecho
Lo mas que a mí me interesa:
Es esa enorme grandeza
Que tú manejas guardada,
De una montaña rodeada,
Que mui poco ve la luz.
Como flor entre el capuz
Está la perla emboyada.

  Una inmensidad de mares
He recorrido por verte,
Batallando con la muerte
Para aliviar mis pesares;
Te busqué en varios lugares
I no te pude encontrar;
Ya me hacias desconfiar
Que existias en la faz,
Porque me creo que estás
Como el diamante en el mar.

  Ver que no te pude hallar
En ni una parte del mundo,
Navegué el mar profundo,
Dia i noche sin cesar,
I nunca pude alcanzar
De ponerme a tu presencia.
Ya sin tener resistencia,
Lloré mi cruel deventura;
Para gozar tu hermosura
Se quere tiempo i paciencia.

  No me detuve un instante,
Ni un momento descansé,
Hasta que ya te encontré
Separada de tu amante.
Con amoroso semblante
Me salistes a encontrar.
¡Ah, qué dicha al contemplar
Sus caricias, considero!
Se quere tener dinero
Para poderla gozar.

  Al fin el precioso dón
Que tiene la prenda mia,
Yo con gusto le daria,
Alma, vida i corazon;
Mis amorios que son
Tiernos, dulces i amorosos.
¡Qué ratos tan venturosos
Gozo con ella en el sueño,
I cuando sea su dueño
Seremos los mas dichosos!

Ver lira completa

image_pdfConvertir a PDFimage_printImprimir

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *