A setenta i dos espinas
Hago esta salutacion
Saludo las cinco llagas
Cuanto encierra la pasion.
Salúdote hermosa cara
De Jesus resplandeciente
Escupida de vil jente
Porque al pecador ampara
Siete palabras declara
Entre angustias disciplinas
Saludo sienes divinas
Cuando a la corona vieron
Humildemente admitieron
A setenta i dos espinas.
Saludo ojos benignísimos
Llorando del Redentor
Estan por el pecador
Con un velo cerradísimo
Saludo oido castísimo,
Que por darnos Redencion
Como digno a compasion
Saludo boca i garganta
I esa lengua sacrosanta
Hago esta salutacion.
Salúdote blanco cuello
Con duras sogas ceñido
Solo Señor habeis sido
Fianza del mundo i su sello
Sin aplacar el destello
Sobre sus hombros las dagas
Descargan tan duras plagas
Saludo espalda sangrienta
I entre el dolor que atormenta
Saludo las cinco llagas
Saludo pecho amoroso
Con infinita concordia
Brotando misericordia
De aquel costado glorioso.
Benditos piés en tal gozo
Cuando el arroyo Cedron
El cirineo Simeon
Decia con voz tiernísima
Salúdote alma santísima
Cuanto encierra la pasion
Al fin saludo al madero
Del Omnipotente fijo
Ya se cumplió mi obra, dijo
El mártir mas verdadero
Salúdote el golpe primero
Del martillo recios casos
I a los mil doscientos pasos
Por la calle de Amargura
Saludote virjen pura
Con tu hijo muerto en los brazos
