Una catástrofe horrible
Cuento ántes que me remonte,
Sucedió en Pozo Almonte,
Lo digo porque es visible.
Sin poner ni un imposible
Cuento lo que publicaron
Los diarios que me mandaron
De Iquique, digo formal:
Que en ese hecho tan fatal
Muchos heridos quedaron
El tren venia corriendo
Con mucha velocidad,
Cuando por casualidad
Se desrrieló, lo comprendo.
En el momendo tremendo
Unos saltos se notaron,
I dos carros se volcaron,
Digo yo como jovial:
Que en ese hecho tan fatal
Muchos heridos quedaron.
Un carro la causa fué,
El que produjo el tormento;
Esta verdad se las cuento
Porque mui bien yo la sé.
Los detalles les daré
A los que no presenciaron,
No lo ví, me lo contaron,
De todo lo principal:
Que en ese hecho tan fatal
Muchos heridos quedaron.
Grande fué la confusion
Al ver lo que allí pasaba,
Toda la jente clamaba
Pidiendo la salvacion.
Al Señor de la mansion
Entre la angustia clamaron,
I por eso es que alcanzaron
La gracia del Celestial:
en ese hecho tan fatal
Muchos heridos quedaron.
Por último, los heridos
Nombro a los de gravedad,
Con toda moralidad
Refrescando mis sentidos:
Daré aquí sus apellidos
Fiando en mi diestra mano:
Bonilla, el gran ciudadano,
Vidaurre, mui religioso,
Contreras, jóven hermoso
I Loaiza, que es peruano.
