Si me sigues contestando,
Criticon impertinente,
Te tengo que avergonzar
En el medio de la jente.
Jerez, el poeta católico,
Quiere enseñarme a cristiano;
Pero no podrá el pagano
Con su talento diabólico.
Su saber es apostólico,
I él mismo lo está probando;
Ver que me estás embromando,
Te contesto con coraje.
Capaz que el alma te raje
Si me sigues contestando.
Cállate, lebrel barcino,
Hijo de la infame perra,
Vomitado de la tierra,
Traza de macho costino.
Te arrastrarás por cochino
Lo mismo que una serpiente.
Pareces quiltro caliente,
Nieto de la negra choca;
Mas bien que cierres tu boca,
Criticon impertinente.
Yo no queria insultarte
Por no desmoralizar
Al público; en mi ejemplar
Digo que voi a enfadarte,
I prometo de sacarte
Del insulto popular
I llevarte a un muladar
Donde concluyas tu vida;
Por tu moral corrompida
Te tengo que avergonzar.
Faltas a la lei de imprenta
I estás escandalizando;
Te van a salir multando
Si te sacan bien la cuenta.
Ningún temor me amedrenta
A mí, porque soi prudente.
¿Qué hace el señor Intendente
Que no mira lo que pasa,
I te hacé poner mordaza
En el medio de la jente?
Al fin, sigue por historia,
Si quieres el contrapunto;
Pero no cambies asunto
Con tu cinica memoria.
Si pretendes la victoria,
No seas tan mal hablado;
Ya muchos te han criticado
Que eres un vano i obsceno,
Porque te has cargado al freno
Como potro desbocado.
Imprenta, MONEDA,
