Sentencia del reo

  El fatal José Carrizo
A muerte fué sentenciado
Por haber ejecutado
Dos muertes de un improviso.

  Era soldado arjentino
De veintidos años, soltero;
Por venganza el altanero
Se convirtió en asesino.
Su rifle con mucho tino
Apuntó contra el occiso
I su mala suerte quiso
Que muriese ajusticiado
Por el crimen desgraciado
El fatal José Carrizo.

  Cuando el hecho cometió
Se pilló al instante el reo
I al momento dijo: creo
Que tal cosa no hice yo.
Al principio no creyó
De que habia asesinado
Un teniente i un soldado
De su mismo rejimiento.
I en tan critico momento
A muerte fué sentenciado.

  ¡Qué tristeza no daria
Este reo ya en el banco
I sin poder dar un tranco
Encomendándose a Maria!
Por lo mucho que sufria
Se cucontraba demudado
Con un centinela armado
Considerando su suerte,
Siendo causa dicha muerte
Por haber ejecutado.

  Un altar improvisaron
En la carpa de campaña
I al reo con voz estraña
Contemplándolo quedaron.
Sus compañeros lloraron
Al verlo asi tan sumiso
En el momento preciso
De la triste ejecucion
Del que hizo sin reflexion
Dos muertes de un improviso.

  Ya sale de la capilla
Con mirada enternecida.
Al rendir allí su vida
Resignado se arrodilla,
Pidiendo perdon se humilla
Con la mayor eficacia,
Para hablar pidió la gracia
I la tuvo mui lijero.
Relató el reo primero
En discurso su desgracia.

Ver lira completa

image_pdfConvertir a PDFimage_printImprimir

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *