EL GRAN FUISLAMIENTO
del reo Echeverria en Santiago

  Emilio Echeverria
Con su vida ya pagó
En el banco se sentó
A morir a sangre fria.

  El gran Consejo de Estado
Teniendo su propio culto
Al reo negó el indulto
Para ser ejecutado;
El sábado ha publicado
«El Chileno» en visarría:
Ya se le acerca su dia
Agoviado de su mal
Fué el hombre mas criminal
Emilio Echeverría.

  El sábado en la mañana
En capilla lo pusieron,
La sentencia le leyeron
Al reo con mucha gana.
La muerte llegó cercana
I de él se apoderó
Su cuerpo inerte quedó
Habiéndole ya tirado,
Ese pobre desgraciado
Con su vida ya pagó.

  Dos curitas relijiosos
En el acto lo ausiliaron,
Lijero lo confesaron
Alegres i llenos de gozos,
Fueron ellos mui gustosos
Donde él he sabido yo,
I mucha jente lloró
En esos tristes momentos
Marchando con pasos lentos
En el banco se sentó.

  Seis soldados prontamente
En el pecho le apuntaron
Lijero le dispararon
El piquete estando al frente
Corrió la sangre a torrentes
Por el suelo se via
El reo tambien decia
Muero aquí sin dar un tranco
Voi a sentarme en el banco
A morir a sangre fria.

  Al fin, mui arrepentido
Murió el reo sin tardar
I su cuerpo fué a quedar
En la tumba del olvido,
Con el corazón herido
Quedó sin resignacion
La jente con precicion
De pena soltó el llanto
Voló el alma sin quebranto
A la celestial mancion.

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