Un hombre se emborrachó,
En la frente le pusieron,
Hojas de parra es que fueron,
Pelos de quien lo mordió.
Me puse un dia a guapear
A presencia de un rotito,
Pensando que era mansito
Pleito le hube de buscar.
El me comenzó a rogar,
Al destajo i me abrochó,
Todo el cuerpo me enronchó,
Con un látigo mui duro,
Pitando un cigarro puro
Un hombre se emborrachó.
Buscando la sin razon
Llegué haciéndome profano,
Al carril i un carrilano
Luego me atracó un guanton.
En el primer encontron
Por poco no me comieron;
Los que allí estaban dijeron,
Qué le ha sucedido al guapo?
Por odioso, un buen sopapo
En la frente le pusieron.
El roto estaba enfurecido,
Peleaba quilvo derecho
I me dió un truco en el pecho,
Me hizo perder el sentido.
De donde quedé tendido,
Fueron i me recojieron,
I en seguida me pusieron
Una bilma a la costilla;
De aniz i pé de castilla
Hojas de parra es que fueron.
Conmigo se te aporuña
Le hablé yo embravecido;
Despues me vide aflijido,
Quitenme que me rasguña.
Me dejó un dedo sin uña,
De un mordisco que me dió.
Hombre, qué te sucedió,
Dijo el doctor a gran priesa,
Pónganle en la cabeza
Pelos de quien lo mordió.
Al fin, por buscar pendencia
A los rotos sin motivo
Casi me comieron vivo,
I quedé a la inclemencia;
Quise yo pedir audiencia,
Pero me tomaron preso;
I por botarme a travieso,
Me hubieron bien de patear
I a la cárcel fuí a parar;
¡Bueno que sufra por leso!
