La semana antepasada
Unos catorce bandidos
Dejaron en un salteo
Cuatro muertos i dos heridos.
Donde Rafael Serrano
Fueron a hacer el asalto,
En la noche, i nada falto
Como poeta ciudadano.
La pluma tiembla en mi mano
Por la accion tan depravada;
Quisiera se vuelva espada
Para herirlos en mi intento:
I sucedió lo que cuento
En la semana pasada.
Llegaron de un sopeton
A la casa con corajes
Rejistrando estos salvajes
Hasta el último rincon;
I yo les sigo la cuestion
A los tales forajidos:
Refrescando mis sentidos
Digo aquí con sano pecho:
Son los autores del hecho
Unos catorce bandidos.
Llegaron haciendo fuego
A la casa de improviso,
Sin darles ningun aviso,
Con un gran desasosiego.
Despreciando el santo ruego
Entraron en el rodeo;
Con un bárbaro deseo
Emprendieron la partida,
I a cuatro seres, sin vida
Dejaron en el salteo.
Quince de caballería
A perseguirlos llegaron,
Pero no los capturaron
En aquel tremendo dia.
Cometieron la herejía
Porque iban prevenidos
Aquellos hombres perdidos
En el robo al remate,
Dejaron en el combate:
Cuatro muertos i dos heridos.
Al fin, nuestro Presidente,
O mas bien el Ministerio,
Hacen que el tiempo esté sério
En la época presente.
Qué hacer no se halla la jente
Ni encuentra en qué entretenerse;
Nuestra existencia se tuerce
Porque la suerte está ingrata;
No se halla en que ganar plata
Para poder mantenerse.
Imprenta, MONEDA, 25-M
