Jacob tuvo dos mejeres,
Fueron Lia i Raquel:
Ambas dos eran hermanae
I primas hermanas de él.
Cuando ya determinó
Dios, de darle una mujer,
Con infinito poder
Donde Lavan lo mandó;
En dicha casa encontró
La felicidad i placeres:
Se unió con aquellos séres
I cuál de ellas mas queridas
Al principio de su vida
Jacob tuvo dos mujeres.
Catorce años trabajó
Humildemente el amante,
Por ver el feliz instante
Al cual gusto si alcanzó.
Las dos bellezas ganó
Dice el sagrado papel;
Se mostró sumiso i fiel
Al verlas tan cariñosas.
Sus dos primeras esposas
Fueron Lia i Raquel.
Despues que casadas fueron
Las dos, según la version,
Por divina permision
Doce varones nacieron:
Fama i nombre tuvieron,
Según esplican las planas.
En las familias cristianas
Sus nombres están patentes.
De padre i madre creyentes
Ambas dos eran hermanas.
De la casa de Lavan,
Partió el patriarca orgulloso
I se fué a vivir con gozo
Al pais de Canaan.
Como ya comprenderán
Que fué el jefe de Israel,
Como lo dijo Samuel
Con otros mas que lo vieron:
Las dos sus esposas fueron
I primas hermanas de él.
Al fin, con tanta ventura
Toda su vida pasó,
Porque la dicha le dió
Mi Dios, dice la escritura.
Gozó de dicha i dulzura
Sin haber ningún quebranto
I yo aquí sin ataranto
Escribo, como lo ven,
Diciendo de que Enjesen
Feneció el varon santo.
DANIEL MENESES
POETA NORTINO, MORANDE, 8-A
