Espantoso crimen
DE LOS NIÑOS PUELMAS, ACOSADOS
POR EL HAMBRE, EN LA CALLE
DE MAIPÚ.

    Un horrendo criminal
Se encuentra de prisionero;
Por interés del dinero
Cometió este grave mal.

    Se me ha hecho necesario
De hablar las verdades puras
De estas tristes criaturas,
Que nos dió a saber el diario.
Su hermano es el victimario,
Lo dice la capital;
Un tratamiento brutal
Les dió sin mayor derecho;
Por esta causa se ha hecho
Un horrendo criminal.

    Manuel Puelma fué el tutor
Que mostró estas evidencias;
Por lograr estas herencias
Les dió a los niños rigor.
Lo pasaban en clamor
Con angustia i desespero
Muertos de hambre, el caballero,
Los tenia trasparentes,
Por eso que el delincuente
Se encuentra de prisionero.

    Los niños se mantenían,
Según tenemos noticias,
Con cáscaras e inmundicias
Que por la acequia corrían;
También lo sé que dormían
En un lecho de pajero;
El detalle es verdadero
Que aquí, llorando, les doi;
Puelma de reo está hoi
Por interes del dinero.

    Cuando ya fué denunciado
Éste por primera vez,
De la policía el juez
Mandó llevarlo amarrado,
De su esposa acompañado
Fué por el hecho fatal;
Por gozar el capital
Se halla en cá[r]cel de los presos;
Por veinticinco mil pesos
Cometió este grave mal.

    Al fin, don Santiago Prado
Se ha movido a compasion
I con su buen corazon
Los tiene en mui buen estado.
De sentimiento colmado
Quedó el pueblo en desacatos,
El alimento a los gatos
Quitaban como inocente
I ahora toda la jente
Desean ver los retratos.

Ver lira completa

image_pdfConvertir a PDFimage_printImprimir

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *