Qué harán dos que amando se hallan
Si el pensar los atropella,
Ella de vergüenza calla
I él calla de temor de ella.
No han visto que en dos amantes
Que se quieran firmemente,
Cual de los dos que esté ausente,
Dias hacen los instantes.
En ámbos solicitantes
Sus relaciones no callan,
De dia i noche batallan
I en escribirse se ofrecen,
Cuando verse no merecen
Qué harán dos que amando se hallan?
Nadie tiene certidumbre
En el objeto de amar,
Se pueden aniquilar,
Por congojas de costumbre
Envueltos en pesadumbre,
Viendo la misma querella;
Disponen la firme huella
I el camino del deliro,
Solo les vale un suspiro
Si el pensar los atropella.
Nada le concilia el sueño
A la que intenta querer,
Con el deseo de ver
Al que distingue por dueño;
En las cartas el empeño
Se ve lo que se detalla,
Un juramento no falla
Que será justo favor,
Por no descubrir su amor
Ella de vergüenza calla.
Penas, ánsias, dudas, celos
Son las que los martirizan,
I entre el silencio divisan
Martirios, plagas, desvelos;
Mudanzas, nuevos recelos
Siempre la esperanza sella,
Donde los guia su estrella
Se opone a todo la dama,
Jamás descubre lo que ama
I él calla de temor de ella.
Al fin, es mas conocido
En dos que se hayan amado,
El amor desesperado
Deja al corazón herido;
Ningún amante ha podido
Menospreciar la esperanza;
Espera alguna mudanza
Con mala o con buena fe,
Siempre en ausencia se ve
Celo, amor y desconfianza.
