Salve momento adorado
en que eres despues de yerto
en una sábana envuelto
i al sepulcro eres llevado;
i en él fuistes sepultado
mientras la dulce María
presa de amarga agonía
te llora con los amigos
que habian sido testigos
de su pena en aquel dia.
En esa hora postrimera
i término del calvario
como un hecho necesario
i el comienzo de otra era
la resurrección se espera:
Señor mio Jesucristo
te ofrezco i no me resisto
estas amargas querellas
yo te doi gracias por ellas
divino i sagrado Cristo.
