EL LLANTO DE LAS AVECITAS

    Entre el follaje i verdor,
a los rayos de la lnna,
de su malvada fortuna
se quejaba un ruiseñor,
lanzando rodo el dolor
en su cancion plañidera:
¿como quieres, ho pradera,
encanto del alma mia,
deyolverme la alegría
si nu eeta mi compañera?

    ¿Porqué no viene la ingrata
a curarme con su ciencia
si es sslo su indiferencia
la que en el mund me mata?
la que el placer me arrevata,
la que me cubre de pena,
la que el pecho me me barrena
I el corazón me tortura
la que causa mi locura
i a llanto cruel me condena?

    Què te he hecho bien perdido,
para avandonarme así,
acaso no fuí de ti
el amante mas rendido?
¿cual es ei estraño nido
en [q]ue ahora estas viviendo?
¡ho arboles hue estas viendo
la qena que me devora,
decidmelo sin demora
porque ya me estoi muriendo!

    Oiga el mundo mi agonia,
impóngase de mi queja,
porque ya no oirà su oreja
nunca mas mi melodía;
pues si mañana en el dia
no busca la cruel su hogar
ni se apresura a enjugar
el duro llanto que vierto,
cemo si estuviese muerto
¡ya uo volveré a cantar!

    Este quejumbroso acento,
fué donde su compañera
que se hallaba prisionera,
cojido en àlas del viento,
fue ianto su sentimienlo
i tanto lo que lloró,
que mucho se adelgazó
i de la jaula escapando.
[ ] su uido llorando
[ ] es salvo.

Nota: gran parte de esta décima fue publicada por Adolfo Reyes, ver.

Ver lira completa

HORRIBLE ASESINATO

    Ha habido, caro lector.
entre un joven i una dama
sangriento i horrible drama
por desden i por amor;
es el principal autor
Bejers don Francisco Juan
de veinte años, mui galán
peruano de nacimiento
mozo instruido, de talento
i templado como imàn.

    Se fué el domingo a afeitar
i dàndola de gracejo
se puso frente a un espejo
bastante rato a chralar;
ahí se puso a contar
al peluquero Batren
de que estaba en ocacion
de un largo viaje seguir
pero que antes iba a oir
una misa a San Ramon,

    En la iglesia se postró
con todo recojimiento
mui serca de su tormento
i a la suegra amenazó;
cuando la misa acabó
se ban las dos en confianza
pero Zejers las alcanza
en la calle de Gamarra
i con revólver i garra
a la novia se avalanza.

    Cuando a la niña en la boca
el arma Zegers le pone
la madre se le interpone
valerosa i media loca
pero un cachaso le toca
en la frente i el cerquillo;
el joven movió al gatillo
e hirió a la madre en la mano
i de un modo mas liviano
a la hija en un carrillo;

    Cuando el joven Zegers vió
a madre e hija que rueda,
se arrodilló en la vereda
i al instante se mató;
cuando la niña volvió,
estando en la cama yá
preguntó ¿Zegers que hará?
—ya se mató ese maldito
i ella dijo ¡pobrecito!
¿que irá a decir  su mamá?

Ver lira completa

UNA CAIDA A 500 METROS

    L capital mejicana
Ha presenciado una esena
Que la ha llenado de pena
Eu una infeliz mañana.

    Hai cosas tan espantosas
que relatarlas conmueve
i por eso no se atreve
uno a contar esas cosas;
una de estas horrorosas
ante concurrencia ufana
en la barquilla galana
de un globo tuvo lugar,
que contento vió elevar
la capital mejicana.

    En la Plaza, reunido
estaba un jentio inmenso
cuando se le dió comienso
a un acto divertido;
un hombre mui bien vestido,
la cara de risa llena
en actitud mui serena
en un globo se elevaba
i el pueblo que lo miraba
ha presenciado una esena

    A veinte metros, bien recio
este señor Aleman
hizo esfuerzo i ademan
de sentarse en el trapecio,
el pùblico con aprecio
vió fracasar la faena
i el globo ya se ve apena
i él hace esfuerzo otra vez
¡vano empeño i tirantez
que lo ha llenado de pena!

    Quiso acirse de la bota
pero lograrlo no pudo,
i al ver este empeño rudo
el jentio se alborota;
viene al fin come pelota
jirando como una rana
la familia se devana
llorando desesperada,
al verse tan desgraciada
en una infeliz mañana.

    Llena de justa aflixion
la multitud conmovida
se lanzó despavorida
a ver al bravo campeón;
solo hallaron un monton
de carne i hueso en el suelo;
quiso remontar el vuelo
i el capricho consiguió,
pues tanto se remontó
que fué a parar hasta el cielo!

Ver lira completa

LA LLEGADA DEL “IMPERIAL” MUERTOS HERIDOS

    Es el vapor “Imperial”
un buque mas que bonito
i de andar tan espedito
como que no hai otro igual;
sienpre un percance fatal
le presajia el mundo entero
p ro como es el primero
en su andar rápido i fuerte
ha andado con tanta suerte
que no ha sido prisionero.

    Ya se andaba zusurrando
que la escuadra en su despique
ya lo habia echado a pique
mientras iba navegando;
pero ha pasado que cnando
mas circulaba el aviso
se presenta de inproviso
mui contento i satifecho
a descansar en su lecho
al mismo Valparaiso.

    Dicen que en Antofagasta
desembarcó mucha jente
i que ha vuelto de repente
a llevar la misma pasta;
como ir en una canasta
va la jente de contenta.
pues si viene la tormenta
i se encuentra en un apuro
para arrancar, de seguro
sus dos calderos revienta.

    Ya el Gobierno ha mandado
para atender los heridos,
a médicos mui sabidos
que en Santiago ha contratado
en el “Isis” ha marchado
el personal sanitario;
según el itinerario
del Vapor de la carrera,
en la semana postrera
llegaran allà canario!

    La jente por sí curiosa
no lo digo por su mengua,
andará largando lengua
con furia vertijinosa
por saber alguna cosa
el dia de la llegada
i la tropa maltratada
tendrá que sufrir ¿Dios mio!
intempestivo rocio
de pregunta eslabonada.

Ver lira completa

BRINDIS

    Brindo bella porque aquí
[Me v]as a llenar mi vaso;
[ ]e goce me abraso
[ ]uare no dá de sí.

    Allá en mi primera edad.
[ ]mi breve jnventud
[ ]guardar en ataud
[ ]la señora Amistad
[ ] pasè mi mocedad
[ ]gando esa acerba hiel;
[ ]ver engaño tan cruel
[ ] labio a jurar se atreve:
[ ]e el vaso donde se bebe
[ ] el amigo mas fiel.

    Otro homhre nos arrebata
[ ] corazón de una hermosa
nuestros sueños de rosa
[cu]alquiera pérfida mata;
mujer que no sea ingrata
no la halla ni Satanás.
Celos a ninguno das
tú, licor, con tus favores
pues siendo cien bebedores
se goza… ¡cien veces más!

    Nuestra juventud florida
breve se oculta a lo lejos
i de su sol los reflejos
nos dan ya la despedida
i aunque el placer en la vida
es un rato de locura,
no me hiere la amargura
al ver su fulgor escaso,
porque en el fondo del vaso
sé que se halla la ventura.

    Sobre nosotros se lanza
triunfante el dolor un dia
llevàndose la alegría
i dejando la esperanza
que a nadie presta confianza
ni complacencia ni paz;
yo, como buen capataz,
tengo por primera cosa:
que este vaso que rebosa
¡no esté vacío jamás!

    Hoi, que en guerra malvada
miramos hora tras hora
por mano aleve i traidora
tanta existencia tronchada,
que la sangre derramada
ya se propaga con creces,
guargüeriando hasta las heces
amigos, el vaso alcemos
entusíasmados gritemos:
Viva Chile una i mil veces!

Ver lira completa

CARTAS MILITARES
DE SOLDADO

    Mi estimada Soledá:
me alegraré que al recibo
de estas lineas que te escribe
te sncuentres sin novedá;
hai de saber con verdá
que mi confución es harta
i el objeto de esta carta
es  pedirte solamente
seis riales pa el asistente
del capitan de la cuarta.

    Por jugarlos los perdí
i áura me quiere matar
porque no puedo pagar
i me he acordado de tí;
ya veras Soledà sí,
como en juar no tuve tino
lo tuve para ser fino,
con que mandamé el dinero
por lo mucho que te quiero.
Tu palomo —Saturnino.

DE ALFEREZ

    Soledad del alma mia:
estoi loco de contento;
en este mismo momento
vengo de la sastrería
en donde con alegría
i gusto descomunal,
i como punto final
a mi brillante carrera,
me han bordado en la guerrera
las insignias de oficial.

    Pue bien en cuanto he salide
me ha saludado un soldado
i me he puesto colorado
quedando todo corrido
de la emoción que he sentido
con el saludito aquel
Adios! me voi al cuartel,
dentro de media hora escasa
estaré frente a tu casa.
Te adora tu …… Rafael.

DE CAPITAN

    Por fin he asendido yá
Soledad encantadora
i me parece que ahora
no se opondrá tu mamá;
seremos, a lo que vá
los dos mas felices seres
Soi capitan ¿que mas quieros?
iya lo ves! de esta manera
para cuando yo me muera
te corresponden haberes.

    Llevarte a la vicaría
puedo ya, mi Soledad
porque tendras viudedad
como tu madre quería;
lena el alma de armonia
i de placer soberano,
mañana pido tu mano
si tu madre está contorme.
Posdata iré de uniforme.
Hasta mañana!—Mariano.

DE COMANDANTE

    Ya dispensaras, Solita,
que no te mande el dinero
porque el capitan cajero
se fué a pasear a la Hermita
i ha agarrado unamonita
con toda formalidad;
estas cn necesidad
de aguardar, pues ya lo sabes,
que se ha llevado las llaves,
¡mira qué contrariedad!

    Mucho siento no poder
ese dinero mandarte
i esponerme a disgustarte
pero ¡qué le hemos de hacer!
yo cumplo con mi deber
i te lo ruego, mi hermosa,
que por no haber otra cosa
te resuelvas a esperar,
¡muchas veces sin pesar
tiene que hacerlo mi esposa!

DE CORONEL

    Me revienta el Rejimiento
señora viuda de Ruiz
i no puedo ser feliz
sin un acompañamiento;
señora: usté es un portento,
mui guapa i de buen palmito,
tiene un dote redondito
i buen corazón, no hai duda,
i sobre todo eso. . viuda
que es lo que mas necesito.

    Ya que mi suerte se empeña
a usté me dirijo yó
para que diga sí o nó
como Cristo nos enseña;
diga: ¿quiere ser mi dueña
i mandar mi corazon?
cogollito de cedron
¿quiere casarse conmigo?
conteste a su fiel amigo
que besa sus piés—Leon

Ver lira completa

MEMORIAS
DEL SOLDADO PICARDIA

    Muere en alguna loma
en defensa de la ley,
o anda lo mesmo que el guey
arando pa que otro coma.

    Y he decir asi mismo
porque de adentro me brota.
que no tiene patriotismo
quien no cuida al compatriota.

    El que no tiene colchon
en cualquier parte se tiende
el gato busca el jogon
y ese es mozo que lo entiende.

de aqui comprederse debe
aunque yo hable de este modo
que uno busca su acomodo
siempre lo mejor que puede.

    Lo pasaba como todos
este pobre penitente
pero salí de asistente
i mejoré en cierto modo.

    Pues aunque esas privaciones
causen desesperación
siempre es mejor el jogon
de aquel que carga galones.

    De entonces en adelante
algo logré mejorar,
pues supe hacerme lugar
al lado del Ayudante.

    El se daba muchos aires,
pasaba siempre leyendo,
decian que estaba aprendiendo
pa recibirse de fraile.

aunque lo pifiaban tanto
jamas lo vi dijustao;
tenia los ojos paraos
como los hojos de un Santo

    Muy delicado, dormia en cuja
i no sé porque seria
la jente lo aborrenia
i le llamaban la bruja.

    Jamas hizo otros servicios
Ni tuvo mas comisiones
que recebir las raciones
de viveres y de  vicios.

    Estos diablo de milicos
de todo sacan partido
cuando nos vian riunidos
se limpiaban los hocicos

Y decian en los jogones
como por chocarreria,,
 «con la Bruja y Picardia
van à andar bien las raciones

    A mi no me jué tan mal
pues mi oficial se arreblaba;
les diré lo qué pasaba
sobre este particular.

    Decian que estaba de acuerdo
la Bruja y el provedor,
i que recibiria lo pior
i uede ser, pues no era lerdo

    Que á mas en la cantidà
pegaba otro dentellón
 que por cada ración
le entregaban la mitá.

    Y que esto, lo hacia del modo
como lo hace un hombre vivo
firmando luego el recibo
ya se sabe, por el todo.

    Pero murmuraciones
no faltan en campaménto;
déjenme seguir mi cuento
o historia de las raciones.

    La Bruja las recebia
como se ha dicho á su modo
las cargabamos y todo
se entriega en la mayoria

    Sacan allí en abundancia
lo que le toca sacar,
i es justo que an de dejar
otro tanto de ganancia,

    Van luego a la compañia
las recibe el comendante
el que de un modo abundante
sacaba cuanto queria

    Asi la cosa liviana
vá mermada por su puesto,
luego se le entrega el resto
al oficlal de semana.

    Este le pasa al sargento
aquello tan reducido,
i como hombre prevenido
saca siempre con aumento.

    Esta relación no ac[abo]
si otra menudencia en [esto]
el sargento llama al ca[bo]
para encargarle el re[sto]

    El tambien sa[ ]
i no se sabe tu[ ]
naides le va [ ]
si ha sacado [ ]

    Y sufren [ ]
i hacen tan [ ]
que ya casi [ ]
cuando lleg [ ]

    Todo es co [ ]
i sucede de or [ ]
tener que junta [ ]
para hacer un p [ ]

    Dicen que las cosas
con arreglo a la orden
puede ser! pero no alc [ ]
tan poquito es lo que c [ ]

    Algunas veces yo pie[nso]
i es muv justo lo [ ]
solo llegaban las miga[jas]
que habian quedado en l[ ]

    Y esplican aquel inf[ierno]
en que está uno medio [ ]
diciendo que dan tan [ ]
porque no paga el go[bierno]

    Pero eso yo no lo e[ ]
ni a aberiguarlo me n[ ]
soi ignorante complet[o]
nada olvido ni nada ap[ ]

    Tiene uno que sopo[rtar]
elmtratamiento mas vil,
a palos en lo eivil
a sable en lo  millitar

    El vistuario, es otro infierno
si lo dan llega a su mano.
en iinvierno el de verano
i en verano el de invierno.

    Y yo el motivo no encuent[ro]
ni la razon que esto tiene
mas dicen que eso yá viene
arreglado desde adentro.

    Y es necesario aguantar
este rigor i este freno
porque el roto no es chileno
sino pa acerlo matar.

Ver lira completa

LAS DOS SEÑORITAS PEGADAS

    Ahora,lector amado.
harè un relato cabal
del caso finomenal
que recien se ha presentado
el dibujo aquí estampado
representa cl aramente
este caso sorprendente
que ha llamado la atención
con justísima razón
en el otro continente.

    Pues este par de lumbreras
es de orijen alemán
i bien unidas estan
del todo por las caderas;
se encuentran mui plasenteras
por encontrarse sujetas
siempre se las vé repletas
por alegría sin fin;
tocan mui bien el violin
i son bastante coquetas.

    La mayor se llama Rosa
i Josefa la menor
de caracter superior
i semejanza, grandiosa;
tienen allí una cosa
como de catorce años;
con unos ojos tamaños
i un semblante picarueño
les arrebatan el sueño
a muchisimos estraños.

    Tiene ngusto diferente
i su salud no es igual
cuando una se halla mal
está la otra perfectamente;
Rosa es robusta i ardiente
i Josefa es mas flaquita
si una aguja maldita
le dà a una picada
la otra no siente nada
 se queda calladita.

    Aver la curiosidad
van los mozos como làuchas
i ahi les dejan los chanchas
mui bien dadas en verdad;
se exhiben en la ciudad
en el teatro de mas brillo;
cuando se llena un bolsillo
abren el otro al momento
pues van a ver el portento
todo honrado i todo pillo.

    Cuando una guarda cama
por tan dura circunstancia
le toca por resonancia
guardarla a la otra dama;
si una de dolor brama
tiene la otra que aguantar;
si una se llega a casar
el marido me pregunto
¿ viendo otro palacio junto
también no querrá entrar?

    ¿Que hombre podrá olvidar
aunque sea mui bueno
“que fruta del cercado ajeno
es mas grata al paladar;
no se quieren separar
porque temen a la muerte
por eso tienen su suerte
ligada tan mutuamente
i al que le hinque una el diente
tiene que ser hombre fuerte!

    Ahora debo decir
la seña justa i precisa
para que vayan de prisa
ver i palpar i oir;
no se tiene mas que ir
como quien dice aqui al lado
al lugar denominado
Paris en la Jeograñia;
i es cuestion de medio dia
 para salir agradado!

Ver lira completa

Cuecas para las niñas i jovenes

     Ya salió la conductora
Con el cochero a bailar,
Tocando la campanilla
Haciendo el carro parar.

     Conductora catorce
I la veintiocho
Aprietan al zancudo
Con la dieziocho.

     Con la dieziocho sí
Como se vé,
Cuando ya paró el carro
Yo los pillé;
     Así conductorcita
Te haces maldita.

     Sale niña en lentos pasos
Con el jóven a bailar
No lo dejes en vergüenza
Que te lo criticarán.

     A la niña bonita
Quitale el velo
Con verte tus ojitos
Me das consuelo.

     Me das consuelo sí
Ofrecelé
Esa linda hermosura
Que se te vé.
     Así como me engañas
Con musarañas.

     Niña te tengo en mis brazos
No me friegues la paciencia
Que no te pienso olvidar
Sin darme correspondencia.

     Niña dame el pañuelo
Que soi un huaso
Así como te quiero
Te doi mi brazo.

     Te doi mi brazo sí
Con todo gusto
El árbol que se seca
No da producto
Asi como me muero
Por tu salero.

Ver lira completa

Tormentos del poeta

El año mil ochocientos
setenta i dos en verdad
fué fecha sin variedad
en que recibi el tormento.

I

     Oid amados lectores
este caso tan fatal,
que yo recibí este mal
de dieziocho años señores;
de Belen los confesores
me daban mucho contento,
hijo, tenga sufrimiento
me decian en voz fina
que el señor mandó esta ruina
el año mil ochocientos.

II

     Cuando del campo marcharon
conmigo a la capital
llegaron al hospital,
como muerto me dejaron
al estadistico hablaron
pidiendo solemnidad
como de la eternidad
les hablé con desengaño;
i era la fecha del año
setenda i dos en verdad.

III

     La madre dia por dia
no cesaba de llorar
cuando me vió marchar
en mi penosa partida,
una sierva conocida
le daba conformidá
soi madre mui desgraciá
decia, infeliz me hayo
el dia cinco de mayo
fué fecha sin variedad.

IV

     En la calle de Maestranza
perdí el ser de mi mejilla
lloraba como avecilla
por falta de mi bonanza
de allí salí sin tardanza
a mi feliz aposento,
quedé como un elemento
al verme yo tan fatal
en la misma capital
en que recibi el tormento.

V

     Al fin veinte años cumplidos
tengo con este tormento
i Dios me abundó el talento
i me dió buenos sentidos
aquí redacto mis bridos
que son como una escritura,
pasé por esta amargura
en esto que hé esplicado
i al verme en fatal estado
entré a la literatura.

Ver lira completa