Por la suspensión del banquete

Por la suspensión del banquete
Por Águeda Zamorano, poetisa popular de Santiago

El acto ya programado
que no se llevó a efecto
tuvo un motivo por cierto
pero muy justificado.

Los poetas populares
íbamos a celebrar
dos motivos que a juzgar
han sido muy singulares.
Pero, lea, usted y compare
cuando más entusiasmados
sucedió lo inesperado
que no se puede prever,
y hubo que suspender
el acto ya programado.

Repentina enfermedad
de nuestro gran director,
del principal promotor
de nuestra festividad;
su estado de gravedad,
que conmovió nuestro afecto
no indicó lo correcto,
acordar la suspensión,
y fué por esta razón
que no se llevó a efecto.

Pedimos, pues, mil perdones
a todos los invitados,
y a los que hayan comprado
sus tarjetas de adhesiones.
Se harán las devoluciones,
anticipando al respecto,
que tenemos en proyecto
algo mejor programado;
pero el que se haya enojado,
tuvo un motivo por cierto.

Nos queda sólo rogar1
que seamos perdonados,
que hoy estaos preocupados
por su estado de salud,
un motivo de inquietud.
pero muy justificado.

DESPEDIDA

Elevando los clamores
por la pronta mejoría
del gran amigo y guía
de este grupo de cantores,
damos las gracias señores
por vuestra noble atención
es el mejor galardón,
con que hemos sido agraciados,
y quedan pues invitados,
pa una próxima ocasión.

1  La décima se publicó así, con solo 6 líneas.

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