Pallando con el diablo

CANTA EL AGUILA  CONTESTA EL CONDOR
Nunca vi ley más odiada
que la que llamas Maldita
pero con la oligarquía
yo la mantendré enterita.
NO te sintái tan seguro,
vos, maldito Satanás:
que el pueblo sigue luchando
y al fin la derogará.
Pero tengo una reserva
que son las fuerzas de Ibáñez;
ellas están con la Ley,
no te asustes ni te extrañes
Las fuerzas del General
van contra la Ley Maldita
y al lado mío ya están
pa que la hagamos tiritas.
A propósito de Ibáñez,
no te hago ningún misterio:
yo provoqué las peleas
cuando anunció el ministerio.
Causó feroz pelotera
tu satánica influencia,
pero han surgido lecciones
muy buenas de la experiencia.
Yo seguiré provocando
peleas entre ibañistas,
porque de intrigas ya tengo
una bolsa bien provista.
Hasta agora te servís
de pro-yanquis divisionistas,
pero hay una mayoría
que son antiimperialistas.
A esos yo me los paso
por debajo de la cola
y si no logro amansarlos
los echo a la cacerola.
Vos te creís, Satánas,
que estás en el mesmo infierno
parece que no sabís
que va a cambiar el Gobierno.
Si me sacai mucha pica,
trigo y carne voy a alzar,
y cuando estés más hambriento
el moño te haré agachar.
El moño no me lo bajas
con hambre ni represión:
ES BUENO QUE YA LO SEPAS
y no te hagáis ilusión.
Cuidado, que lo aplasto
no se vuelve a levantar:
árbol que seca mi mano
jamás volverá a brotar.
El diario EL SIGLO cerraste
y no se pudo imprimir
pero agora más potente
EL SIGLO habrá de salir.

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