Nos escribió una poetisa sorda…

Nos escribió una poetisa sorda.
Fue a ver a Erickson, y este le falló

Ayer a una carpa fui
a ver de qué se trataba
ese gentío que vi
fué la causa de mi pavada.

Sorda como mi apellido
miraba y no comprendía
sólo sentía un gran ruido
de murmullo que crecía.

En esto veo subir
a unos señores trigueños
a algo así como un prosenio
onde quieren discurrir.

Cánticos y peroratas,
exortación a la gente
pa que rece y se arrepiente
de su vida tan ingrata.

Miro pallá y paracá
la reaución de la gente
y, oh señor, mi pobre mente
hasta el último rincón
por poco se destornilla
al ver que hasta en la camilla
hay enfermos expectantes.
Como pueden comprender
soy bien lerda para pensar
recién las vengo a cachar
que a Erikson vamos a ver
Salgo por fin, de la carpa
poco menos que asfixiada
oyendo menos que nunca
y por ende apanuncada
Hablé después con un mister
ayudante del pastor
y le expuse mi dolor
al sentirme defraudada.

Silencioso me miró
y yo a él con ansiedá
su hermoso rostro enjugó
aceleró y no habló na.

Nota: respetamos la diagramación de los versos, que solo están separados por estrellas de esta forma.

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