La formación del mundo

La formación del mundo
por Máximo Ramírez Casas

De sutiles nebulosas
sumidas en los arcanos
proceden los mundos todos
ya remotos o cercanos.

Se mueve la nebulosa
y en su rápido girar
se va condensando el núcleo
de un sol inmenso central.

Los trozos que se dispersan
por la ley de repulsión
son las lunas y planetas
en vías de formación.

Ley centrípeta y centrífuga
atracción y repulsión
son las fuerzas que dan curso
a la vasta creación.

Así se formó la tierra
y también el astro rey
con su corte de planetas
originados por ley.

En la magnética zona
de iones bien impregnada
es la energía del sol
en luz hermosa trocada.

En corpúsculos y en ondas
se transforma la energía
la atmósfera se ilumina
y nace la luz del día.

En el principio del mundo
como nada de ello había
en el caos más profundo
la negra noche existía.

Los gaseosos elementos
vertidos en cavidades
fueron formando los mares
a través de las edades.

De gigantes nubarrones
el cielo se fué poblando
el sol directo y candente
iba el mar evaporando.

Hervía el agua en los mares
y los grandes aluviones
se volvían a volcar
en ciclos de sucesiones.

Después de eternal proceso
todo ya se fué ordenando
hasta quedar el planeta
como lo estamos mirando.

De los átomos simientes
de semillas germinales
proceden todos los seres
tanto plantas y animales.

De modo que cuanto vibra
en la tierra y en el mar
procede todo del Cosmos
y es energía solar.

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