Humilde recuerdo

Humilde recuerdo
(A Gabriela)
Por Simón Pavel, Poeta popular de Santiago.

Nuevamente la tierra que tú dejaste un día
te recibe en sus brazos para darte el calor
que merece la alondra que vuelve enmudecía
después de haber cantando a la paz y al amor.

Dime que no te has muerto, que sólo estás dormida
que fué una travesura para poder volar
en busca de otras flores que son desconocidas
para adornar la patria con un nuevo rosal.

Dime que el trabajo te fatigó y descansas
que vienes a los tuyos con tu apagada voz
a decirles que cuiden con cariño tus plantas
que volverás mañana si es que lo quiere Dios

Vuelve la gran amiga de los analfabetos
la que toda una vida supo sacrificar
en bien de los pequeños que llegan con sus cestos
hasta la humilde escuela por pan espiritual.

Hoy vuelven con su cesto repleto de ilusiones
para adornar la efigie de la diosa dormida
de la humilde maestra que ganó corazones
en su corta existencia de amor y poesía.

Ellos también te creen solamente dormida
porque tu pensamiento sigue viviendo aún
y te dirán “Maestra, de nuevo buenos días…”
porque fuiste en vida luz, cariño y virtud.

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