El zancudo grandote

El zancudo grandote
por Venancio Castañeda
NOTA: Enviado por Luis Castañeda, quien lo ha recogido de labios de su padre, el cual  lo aprendió, a su vez, de Venancio Castañeda, padre suyo y abuelo de Luis.

CUARTETA

Volaba más que un halcón
un zancudo tamañazo
tan sólo de un aletazo
mató un traro copetón

GLOSA

Un zancudo traficante
andaba de tal manera
que a tal enorme carrera
no iguala el judío errante;
él andaba en un instante
del Oriente al meridión
y cuando hace retención
como azogue se resbala
y cuando abría las alas
volaba más que un halcón.

Desde animal se sabía
y de lecturas se cuenta;
tenía dos mil doscientas
y de leguas muy medidas
este bruto combatía
con tigre y liones bravazos
cuando se llegaba el caso
también le hacía desdén,
brama más juerte quel tren
un zancudo tamañazo.

Este animal tan profundo
era overo por la guata,
cuando se abría de patas
no cabía en todo el mundo,
por eso yo me confundo
créanmelo ques razón;
él llegaba a la estrición
hasta elevadas alturas;
y por una travesura
mató un trato copetón.

Este animal tan sequento
una vez que agua tomó;
entero el mar lo secó
tan sólo con el aliento,
cuando sale a campamento
no le tome a los balazos;
menos a los cañonazos
cuando le formaban guerra;
hacía temblar la tierra
tan sólo de un aletazo.

DESPEDIDA

Por fin doy la despedida
por el zancudo grandote
se junta del sur al norte
el puelche y la travesía;
lo vieron pasar un día
para el puerto de Pisagua;
y en el valle de Aconcagua
treinta mil güeyes mató,
después que se los comió
era pior que lampalaguas.

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