El vicio y su cruel aguijón

El vicio y su cruel aguijón
Por Máximo Ramírez, poeta popular de Santiago

Purificando el ambiente
del vicio desquiciador
de una vida superior
se gozará ciertamente
es por demás evidente
de que el vicio es destructor
y que sume en el dolor
a quien su garra aprisiona
y le teje una corona
de amargura y deshonor.

Todo vicio es un pantano
y del que cuesta salir.
En ese lodo el vivir
no ni cuerdo ni humano,
en efecto el hombre sano
y de reflexiva mente,
actuará discretamente
si alude con reflexión
del vicio su propensión
viviendo más cuerdamente.

El alcoholismo y el juego
son trampas del medio ambiente
donde se tara la mente
y se pierde hasta el sosiego
desprovisto y casi ciego
de inteligencia y razón
es del hombre su canción
muy triste y acongojada,
pues su vida esclavizada
anhela liberación.

No es fuerza ser puritano,
ni tampoco santurrón
que funcione la razón
yo le pido a todo humano;
estos versos no son vanos
ni carecen de saber.
El querer es un poder
que puede ser educido
por el que mucho has sufrido
renovarse o perecer.

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