A las pampas del salitre

A las pampas del salitre
por El Diablo cojuelo, poeta popular de Llay-Llay

Nota: El poeta dedica esta décima a los obreros del salitre, cuya huelga acaba de ser ganada

En las pampas del salitre
vida amarga y desolada
cañón de la encrucijada
de los años que te fuiste;
pero ahora ya volviste
a sacudir ese yugo
a libar de aquellos jugos
a pedir para tus hijos
con inmenso sacrificio
pan, un mísero mendrugo.

Fue en sangre un día bañada
–clamó reivindicación–
fue tan grande la traición
que tu voz fue ametrallada;
esa fue una canallada
pal que labora riqueza
que se roban las empresas
como Lautaro Nitrate;
!ya parece disparate
que le den tanta largueza!

Unidos sí vencerán
recuerden al gran Maestro
que luchó para los nuestros
¡paladín de la verdad!
la Pampa no lo verá
pero queda su enseñanza
y con ella la confianza
de unir al proletariado
y junto a él los empleados
sin ninguna discrepancia.

¿Esa zona de emergencia
se impuso por precaución?…
¿no habrá una mala intención?…
A todos causa impaciencia:
resulta ya una vergüenza
¡coartar la libertad!
eso es marchar hacia atrás
por el áspero camino
de los sufridos pampinos
de esa inmensa soledad.

DESPEDIDA

No desmayes, noble esposa
y ayúdale a tu marido:
¡que nunca salga vencido,
que triunfe, esa es la cosa!…
Siempre has sido valerosa
tenis el mismo derecho
de poner también tu pecho
para defender a tu hijo
y afrontando el sacrificio
vuestro triunfo será un hecho.

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Penurias del temporal

Penurias del temporal
por el Diablo Cojuelo

Hunbo una angustia en mi pecho
los días de temporales
estaban mis familiares
con el hogar ya deshecho;
crecía de trecho en trecho
el río del Aconcagua,
mi mujer junto a su guagua
lloraba ya enloquecida
pues se veía perdida,
el torrente la llevaba.

En los precisos momentos
aparecen los bomberos,
desafiando el aguacero
inician el salvamento;
eran tantos los lamentos
no hubo a quien no enternecieran,
los llevaron a Calera
en carros ‘e ferrocarril,
a’i los hacian dormir
cada cual como pudiera.

No quiso el Departamento
facilitarme un camión
para ir en salvación
a pesar de mis lamentos;
no le encuentro fundamento
al Señor de Bienestar
el no querer ordenar
medio de locomoción,
hombre cruel sin corazón,
con un alma de chacal.

Siendo una obra fiscal
tenía la obligación
de prestar la protección
para poder auxiliar;
más, gracia a mis compañeros
que a pies fueron los primeros
en salvar algo p’al frío
lo demás lo llevó el río
es la desgracia ‘el obrero.

DESPEDIDA

La tragedia ya pasó
y hay que volver a los ranchos
y vivir como los chanchos
eso es lo que se ordenó:
a mi eso me pasó
tambien soy daminificado,
de esos desamparados
que habitamos este mundo
con el dolor más profundo
vivimos siempre explotados.

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Reclaman obreros impagos

Reclaman obreros impagos

(Al Señor Ministro de Vias y Obras Públicas, don Orlando Latorre
Por El Diablo Cojuelo, poeta popular de Llay-Llay.

Hace ocho años empezó
esta obra fenomenal
para agua poderle dar
al puerto ‘e Valparaíso;
obreros con sacrificio
trabajan noches y días
pa salir con la porfía
y ganársela a la tierra
ya que esas obras encierran
el líquido de la vida.

Somos empleados y obreros
y nunca ha sido financiada
ha sido paralizada
siempre por falta ‘e dinero;
el obrero es el primero
que paga sus atributos
ya que no se encuentra justo
que le adeuden sus jornales
que junto a sus familiares
es el que carga el difunto.

Le pido al señor Ministro
por el líquido elemento
que presente al Parlamento
una ley para su arbitrio;
Esto ya parece un mito
y que nadie se interese
Ministro, ¿qué le parece?
péguele Ud. un empujón
yo le pido su opinión
porque a Ud. le pertenece.

¿Qué hacen los parlamentarios
de aquí, de Valparaíso?
¿Qué no ven en el suplicio
Que se encuentra el proletario?
Tienen su vocabulario
antes de las elecciones
andan tras de los chascones
pidiéndoles su votito
y se olvidan del rotito
que les ganó los sillones.

DESPEDIDA:

Valparaíso necesita
así como Antofagasta
una cantidad de plata
para gozar de su agüita;
mire que la flor marchita
también se puede secar
y también puede faltar
y no hallar dónde beber
mucho más se puede ver
¿y a quién habrá que culpar?

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