Con todo respeto a mi buen doctor

Con todo respeto a mi buen doctor
Por Pedro González, poeta popular de Rancagua

Es corta mi educación
apenas puedo expresarme,
pero debo conformarme
con demostrar comprensión;
fué tan grande mi aflicción
cuando grave me encontraba,
apenas mis pasos daba
y a su presencia llegué.
Hoy doy gracias a usté
que estoy como no pensaba.

También debo agradecer
a usted querido Doctor
que ha sido mi protector
en mi duro padecer;
yo pensaba que mi ser
muy poco más duraría
y que pronto dejaría
mi corazón de latir;
pero he vuelto a revivir
y ahora canto de alegría.

Con su tan buena atención
y su saber talentoso
usté alivia el angustioso
latir de mi corazón;
Seguiré mi tradición
con alta moral, sereno
como patriota chileno
en este suelo querido
gracias a usté porque ha sido,
tan noble, tan digno y bueno.

Cabe en mí el agradecer
y usté debe perdonar
que ha venido a molestar
mi pobre aflictivo ser;
usté supo comprender
mi tan dura situación
y tomó con decisión
mi gran mal entre sus manos
y hoy me siento casi sano
gracias a su abnegación.

DESPEDIDA:

Y por fin harto contento
me siento yo por hoy día,
pues tengo más energía
y ya es menos mi tormento;
porque ya mi sufrimiento
al pasado no se iguala,
en que fué bastante mala
mi salud y situación,
y gracias por su atención
yo le doy desde mi sala.

COGOLLO

Y ahora a usté gran Doctor
cogollito de romero
verlo feliz solo quiero
muy junto a su dulce amor;
sin tortura y sin dolor,
sin que lo ataquen los males,
florézcanle los rosales
por ser hombre consecuente,
le desea su paciente
llamado Pedro González.

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