Carta a los campesinos de Arauco

Carta a los campesinos de Arauco
Por Ismael Sánchez, poeta popular de la Candelaria.

MI viaje se ha postergado
casi indefinidamente
y es lo que precisamente
me tiene más amargado;
Cómo me habría gustado
el ver pacer los rebaños
también los potros huraños
conducidos por jinetes
estando entre vuestra gente
dando el abrazo del año.

Por si a alguno le interesa
saber de la capital,
ésta se siente muy mal,
un fuerte dolor le aqueja;
No se puede con certeza
hablar de un futuro digno
mientras tanto que los gringos
malogran la economía
trayendo sus porquerías
o cañones que es lo mismo.

No puedo en esta ocasión
hablarles del pan y queso
porque temo que si hay viejos
se mueran del corazón;
Esta es la mejor razón
que tengo para escribirles
una ocasión para decirles
de que no pierdan la fe
lo demás vendrá después
que termine lo inservible.

Ahora les pido a ustedes
que me suministren datos
y dejen libre a pilato
ta viejo y no se la puede;
Les ruego que sean breves,
dispongo de poco tiempo
no les pido un testamento
que ocasiona mayor gasto
porque yo también trabajo
pa costearme el alimento.

Díganme si tiene Arauco
entre toda su belleza
aparte de otras riquezas
para la bebida sauco;
o si crece allá en el Rauco
si se extrae xxx¹
lo que es para la cardiaca
antibiótico excelente,
si beben el aguardiente
con leche pura de vaca.

Díganme si ponen quesos
las vacas dentro del balde
si hay terrenos que en balde
se están haciendo los lesos;
Si es un hombre de progreso
el dueño del latifundio,
un aquel llegado al mundo
pa servir al semejante,
si viven como atorrantes
en un rancho nauseabundo.

DESPEDIDA

Por fin no quiero que tomen
a mal todo lo que he dicho
y aprecien el sacrificio
que hago al dar mis opiniones.
Aunque me sobran razones
que las considero justas,
estas que a otros le asustan
a mi me dan optimismo
cuando digo que los gringos
se llevan la mejor fruta.

1  Ilegible en nuestro impreso.

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